Premian a la elegancia

Tras haber sido suspendido por la epidemia de influenza que sacudió a todo el país, el Gran Concurso Internacional de Elegancia 2009 resurgió con nuevos bríos, congregando aún más coches que en la fecha original –más de 400- y repitiendo un doble primer lugar para el premio “Best of Show” en sus 23 años de historia.
Los autos dignos de tal reconocimiento fueron un Mercedes-Benz 220B Cabriolet 1952 (2.2 litros de seis cilindros, 80 HP) propiedad de Joerg Stege, y un Jaguar MK IV 1947 (3.5 litros, seis cilindros de 125 HP) de Julio César Cuenca, ambos inmaculadamente restaurados y sin duda merecedores de la máxima presea del evento. Sin embargo, hubo otros que destacaron como un rarísimo Alfa Romeo Giulietta SS, un par de Volkswagen de la II Guerra Mundial (únicos en México), una Mercury “Woody” 1947 que vino desde San Luis Potosí, varios Ferrari de los 50 y un Mercedes-Benz 300 SL “Gullwing”.

El mejor auto americano
También se premió al mejor auto norteamericano: Un lujoso Plymouth Belvedere convertible modelo 1956 perteneciente a Antonio Caso, miembro del Club de Autos de Colección Chrysler. Este modelo hace el gran honor a los potentes motores Hemi V8 de 187 HP a 4,400 rpm que fueron colocados por Chrysler en las clásicas competencias norteamericanas de entonces.

Lanzamientos nacionales
El Concurso de Elegancia fue aderezado con la presencia de 17 marcas de la industria automotriz, siete lanzamientos entre ellos los más destacados fueron los del Ford Shelby Cobra 2010 de 540 HP, el Ford Focus RS 2010, el Pontiac Solstice cuyo modelo 2010 sólo tendrá 100 piezas en México, el Mazda Speed3 2010, las dos versiones de Camaro 2010 para el mercado mexicano, el Mastretta MXT cuyo primer ejemplar de exportación fue exhibido sólo para los visitantes a Huixquilucan, los Mitsubishi Montero Sport y Grandis 2010, los Chrysler R/T y toda la familia.
Además de los lanzamientos para el mercado mexicano, también hubo tres pistas de Off-Road con las exhibiciones de los Hummer, Tour Cheyenne con las camionetas 4 X 4 Silverado y los LR2 de Land Rover.
En resumen, fue un fin de semana que superó las expectativas de todos los asistentes, pues la mayoría de la gente esperaba un evento alicaído con pocos autos y asistencia, y resultó todo lo contrario: un regreso triunfal del evento automotriz más importante de México.

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